Opinión

La culpa es del alcalde… ¿O no?

Lo que ha pasado en estas fiestas de Pinto no es más que la prueba de que nuestro país está atravesando por varias crisis, no sólo la económica. En este caso hablamos de la crisis de valores.  Con esto nos referimos a grandes elementos como la aparente ruptura entre la mal llamada clase política y el resto de la sociedad y a elementos más pequeños como que no sabemos comportarnos como ciudadanos.

En primer lugar, no apreciamos que el Ayuntamiento busque mejorar la seguridad de la gente y, con tal de hacer una aparente oposición, se oyen comentarios como “se ha hecho durante mucho tiempo en el auditorio y ahora van estos y lo cambian”. No seré yo quien infravalore la opinión del resto, pero la seguridad de los vecinos no puede estar limitada por esta magnitud de ideas románticas.

Así y todo, lo irritante ya no es eso, sino que el primer día se detecte más de una veintena de armas blancas y que los dos siguientes haya altercados. Y en estos casos hay que ser totalmente claros. La policía, la guardia civil y el resto de cuerpos de seguridad trabajan para que nosotros podamos vivir con tranquilidad, con paz y con libertad. Son ellos los que hacen posible que la convivencia exigible en toda democracia funcione. Mientras nosotros estamos en estas fiestas pasándolo bien ellos vigilan que todo se desarrolle en condiciones. Pero su deber va más allá: Ellos darían la vida para que nosotros pudiéramos salir ilesos en el caso en el que hiciera falta. Y nosotros se lo pagamos con botellazos y a pedradas. Es que hemos perdido completamente el norte. No tiene justificación. Si no has podido entrar a la macro por los motivos que sean, no has podido. No se acaba el mundo ahí y no da razones para golpear a nadie. A nadie. Es que estamos hablando de que hay trabajadores municipales que nunca se han encontrado en esta situación y que van a trabajar con miedo y eso es una vergüenza. Ya no hablamos sólo del caso de los cuerpos de seguridad.

Finalmente, cuando se toma la decisión inteligente de cerrar la macro por la seguridad de todos decidimos echar la culpa al alcalde y, en algunos casos, hacer uso político de ello. Y esto es el remate. Y hay que hablar claro aunque haya dureza en las palabras. Tenemos la mentalidad de que aún vivimos en una dictadura y de que todo lo que ocurra, al no haber participación ciudadana, no es culpa nuestra. Pero vivimos en una democracia y tenemos el deber de participar. Es aquí donde llega la crisis de valores de la que hablábamos al principio: La culpa de todo la tiene el alcalde, no nosotros.

Cuando se quita el dinero público a los toros acudimos en masa a reventar los plenos. Y decimos que los reventamos por culpa de alcalde, como si no pudiéramos controlar el poder paralizar o no una sesión plenaria. Por cierto, con la de cosas que se aprueban en los plenos y sólo se llenan con estas cosas. Seguimos. Cuando se cambia la macro de sitio para mejorar la seguridad la culpa es del alcalde. ¿La culpa de qué? Cuando los cuerpos de seguridad y los asistentes a un evento (los que sí saben divertirse me refiero) son atacados la culpa también es del alcalde. Cuando se suspende la macro porque la situación es insostenible la culpa es del alcalde. Y si sacamos rédito político de situaciones penosas, mejor. Nadie se ha parado a pensar que la culpa sea de la sociedad sin valores que estamos creando. No hablo de valores como el patriotismo o el catolicismo que son temas individuales, hablo del civismo que nos afecta como colectivo. Eso ya no está. Y así va con todo. La culpa de que haya corruptos y tránsfugas en las instituciones, de que haya recortes en servicios esenciales con todo lo que eso conlleva, de que nuestro Congreso sea un circo y el resto de problemas que como sociedad tenemos es del alcalde, de Rafael Sánchez. Y si no pudiéramos culparle a él acudiríamos a otros pero jamás a nosotros mismos que, como individuos, podemos ser un gran motor de cambio. La culpa de que los corruptos vuelvan a salir elegidos, de los recortes que siguen existiendo y de que nuestro Congreso sea un circo será de cualquiera menos de los que aprobamos con nuestro voto este tipo de comportamientos. Ahí reside la base de la crisis de valores, en que la culpa nunca será nuestra y creo que ha llegado el momento de que como ciudadanos en sociedad democrática asumamos responsabilidades, que nada no es ajeno y que la culpa de lo que ha ocurrido en estas fiestas no es del alcalde, sino que es de una muestra de la sociedad en la que vivimos. Tristemente.

Cuando yo estaba en el instituto, España era conocida mundialmente por ser líder en el sector de las energías renovables, por celebrar buenas fiestas y por ser uno de los países que más dona. Lo primero ya no lo somos, lo segundo ya no lo sabemos hacer y en lo tercero seguimos en cabeza. Y esas tres cosas son gracias a todos nosotros. Para bien o para mal. Seamos responsables y empecemos a asumir las culpas no sólo de lo bueno, sino de lo malo.

Javier Bedmar

Javier Bedmar

Nací en el 94. Progresista, europeísta y católico. Ingeniero de materiales.
No dejemos nada por imposible y no dejemos de sonreír.

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7 Comments

  1. flanchoco
    22 agosto, 2017 at 15:02

    Es muy bonito lo que dices….pero yo creo que cada uno sabe lo que quiere, para saber realmente que pasó habia que estar en la noche. Los incidentes son injustificados, y estoy diacuerdo en eso, pero siempre estamos echando balones fuera…un aforo que nunca se lleno, poca presencia de seguridad en las 2 primeras noches, un portero y de vez en cuando otro haciendo cacheos en una fila que no tenia ningun orden…eso si…tira el vasito de plástico antes de entrar…

    también vamos a organizar las cosas en condiciones, por que no se hace al aire libre como Aranjuez o Valdemoro? a quien le interesara ee?…negocio negocio

  2. Luis
    15 agosto, 2017 at 12:36

    Javier Bedmar bien dices.”””Pero vivimos en una democracia y tenemos el deber de participar, es aquí donde llega la crisis de valores. “”Aquí en nuestra querida España, quien trabaja por los valores. Es muy triste ver los partidos que nos an mandado solo sean preocupado dela corrupción dentro de sus partidos, y hay siguen diciendo que no, queson muy honrados.Así será muy difícil inculcar valores. Y sigue metiendo Y la sociedad se lo torera. Cuando la sociedad les deje de votar entonces empezará los valores.

  3. Luis
    15 agosto, 2017 at 12:04

    Desde el dia10-8-17 Cuando se escribe estos Twitter haciendo comentarios como este y otros parecido el cual decía. ¿”” Esta es la democracia delos PODEMITAS DE PINTO, Qué su alcalde no deja entrar aúna peña al pregon de las fiesta patronales porque le tocan los cojones y con razón. Vaya mierda de programa de fiestas.?””” Tal cual puesto por personas que tiempos de atrás han tenido representación en la instituciones de Pinto. Lo que a pasado y todavía al día de hoy sigue escribiendo Twitter echado leña al fuego. Lamentablemente que estas personas sigan representando a Pinto. Están fuera de la razón y del sentido común, y dela vergüenza dela persona.

  4. Luis
    15 agosto, 2017 at 11:31

    Un artículo muy acertado por las cosas qué dices, y esa es la realidad cuando se llevan navajas esta todo dicho para suspender. Javier Bedmar. Luego tenemos personas que lo ven de otra forma, miren que personas son y viendo lo que cuelga en su Twitter. Esta todo dicho el pueblo de Pinto los vamos conociendo.

  5. Ivan
    15 agosto, 2017 at 06:42

    “España era conocida mundialmente por ser líder en el sector de las energías renovables, por celebrar buenas fiestas …””… si este es tu ideario de España apaga y vamonos. Celebrar buenas fiestas…y te quedas como si nada. Como si eso fuese lo mas importante. Esta claro que la perdida de valores como la familia y el catolicismo esta hundiendo esta sociedad

    • Javier Bedmar
      18 agosto, 2017 at 15:38

      Hola, Iván. Evidentemente, no, las fiestas no son mi idea de España. Sólo quería poner 3 ejemplos diferentes con los que se nos conoce fuera. Y guste o no, uno de ellos es la fiesta aunque, claro, hay muchas más cosas como ya he dicho y siempre he dicho. Mi ideario de España creo que queda bastante claro en el momento en el que se me oye hablar sobre él y no sobre unas fiestas locales. Por cierto, soy católico y creo que por lo que has dicho también. Por eso mismo creo que antes de disparar debemos preguntar. Y si no también.

      Un saludo.

  6. Pedro
    15 agosto, 2017 at 00:22

    Toda la razon, tenemos que emoezar a ser responables de educar a nuestros hijos, de empezar a usar la cabeza, de respetar a los representantes del pueblo que han sido elegidos democraticamente aunque no hagan lo que nos gustaria pero si aquello que dijeron que harian, tenemos que entender que las fuerzas de seguridad son los buenos y los borrachos folloneros no lo son,tenemos que volver al sentido comun para poder convivir todos.