Afectados por la hipoteca en Urbanización Cristina Sur de Pinto

En junio de 2010 se firmaba el contrato de compra venta sobre plano, en el que se comprometían a un pago inicial y una cuota mensual mas extras durante 34 meses, a los cuales todos hicieron frente. En marzo de 2014, con la entrega de las llaves, llega la hora de escriturar la vivienda, y es entonces cuando varias familias se encuentran con que La Caixa les deniega la hipoteca.

Con este problema encima, las familias afectadas buscan soluciones, y tras ponerse en contacto con Santiago Lahoz, miembro de PROLA,  éste les ofrece dos alternativas: un alquiler con opción a compra, o la venta de la vivienda.

Con el contrato de alquiler con opción a compra se fija la cantidad de 400€ mensuales durante 2 años (con posible prórroga), pero transcurrido ese plazo deberán comprar la vivienda. Aun así los afectados no están satisfechos con el acuerdo puesto que transcurrido ese tiempo perderían su casa por no poder hacer frente al resto, y con ello también perderían los 35.000€ ya invertidos.

Con esto, PROLA también les propone la venta de su vivienda, pero con la situación actual del mercado inmobiliario es poco factible vender dicha vivienda al precio fijado en su fecha inicial.

Viendo la situación, como ultimo recurso, PROLA decide rebajar las viviendas unos 12.000€, donde se verían beneficiados todos, tanto los nuevos compradores como las familias afectadas.

Aun así, los afectados piden más soluciones. Se niegan a perder los 35.000€ invertidos.

Desde PROLA se argumenta que a la hora de escriturar los pisos, si los clientes decidían no comprar, se les devolvía el dinero. Además se ha realizado una rebaja sobre el precio total del inmueble, tanto a los nuevos compradores como a los afectados. Sin embargo, sólo una persona ha justificado en papel que no se le concede la hipoteca.

También defienden que hay que mirar caso por caso, pues se han encontrado casos con gente que ya no quiere comprar los pisos. Pero también ha existido gente que ha buscado otra entidad y les ha sido concedida la hipoteca.

En total hay 360 pisos, de los cuales más del 50% están escriturados y vendidos. Alguno clientes han vendido el piso por cuenta propia y desde PROLA se ha pagado el precio inicial de la vivienda.

En la alternativa de alquiler con opción a compra, una parte de lo pagado sirve para hacer frente a la hipoteca y la comunidad (que actualmente los está asumiendo la propia constructora). El contrato finaliza en febrero de 2016(fecha límite que el banco establece para la venta de la vivienda), aunque aseguran que lo más seguro es que se puedan ampliar.