Opinión

Pánico a una muerte ridícula (canción de Def Con Dos)

Status del Partido Popular en estos momentos: Pánico a una muerte ridícula. Como no era de esperar, o sí, depende de cómo se mire, estos del PP vuelven a las andadas. Si los jóvenes de los 90 no tuvimos bastante con todas las cancelaciones de conciertos y festivales que sufrimos a manos del gobierno del alcalde madrileño José María Álvarez del Manzano, ahora llega la 2ª parte de aquella entrega, de la mano del Sr. Almeida. Una 1ª entrega que comenzaba en los 90 y perduraba hasta prácticamente 2015, cuando se produjo un cambio a la izquierda en el Ayuntamiento de Madrid.
Todavía recuerdo aquella cancelación, porque sí porque aquí mando yo y digo que a Madrid no vienen esos melenudos, del festival Monsters of Rock que en el año 91 nos traía a Tesla, Metallica y AC/DC como cabeza de cartel. Aquello fue muy fuerte y retumbó por todos los
rincones de nuestra geografía.
Muchos años han sido los que una y otra vez ha habido un veto total a muchísimas bandas, pero estos señores del PP tienen que comprender que la música es para todos los gustos, al igual que la política. A ellos les gusta mucho Azúcar Moreno, sobre todo para sus campañas
electorales, y sin embargo, lo tenemos que pagar todos, o eso es lo que ellos se creen.

Ahora, con el anuncio de la cancelación del concierto de Def Con Dos para el día de hoy en las Fiestas del madrileño barrio de Tetuán, vienen a mi cabeza tantos y tantos vetos a otros artistas del panorama musical de nuestro país que tan gratamente nos deleitan los oídos.
Artistas como Pablo Hasel, Russian Red, Soziedad Alkoholika o el mismísimo Fermín Muguruza, entre muchísimos otros.
Con esta actuación del Partido Popular, que se suma a una serie de despropósitos y disparates que pretenden llevar a cabo, como eliminar Madrid Central, despeatonalizar el Barrio de Las Letras y Lavapiés, revertir la peatonalización de una parte de la calzada de la Calle Galileo,
fulminar los semáforos que regulaban el tráfico de la A5, añadir otra bandera más a la fachada del Ayuntamiento de la capital, etc, habiendo otras cosas mucho más importantes que hacer, solo me queda hacer una conclusión, y es que el Partido Popular está sufriendo un verdadero
ataque de pánico a una muerte ridícula de su partido, que agoniza y agoniza sin parar, aunque intuyo que todavía nos quedan muchos años para verlo caer definitivamente.

 

K. Skogsberg

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