HistoriaPinto en la historia

Una vista de la villa de Pinto de 1826

Durante el primer tercio del siglo XIX, el pintor italiano Giuseppe Canella (1788-1847) recorría activamente la capital española y sus alrededores captando bellas vistas con su pincel. A este género pictórico se le denominó vedutismo y floreció en Venecia en el siglo XVIII. Estas primeras vistas urbanas fueron las primeras postales que conocemos de las ciudades.

Primera imagen documentada de la villa de Pinto en 1826

Imagen cedida por la Galería Claude Vittet

En 1825 se creó el Real Establecimiento Litográfico, siendo su primer director el pintor José del Madrazo. Este hecho atrajo a la capital a un buen número de vedutistas, como es el caso de Canella.

Canella nació en Verona en 1788 y fue hijo de un distinguido arquitecto y pintor de frescos, del que quizá heredó sus buenas dotes para la perspectiva y la organización espacial. Después de trasladarse a Venecia, donde descubrió la obra de los grandes vedutistas del XVIII, decidió hacerse paisajista y conocer mundo. España, Holanda y Francia fueron sus principales destinos.

La vista de la Villa de Pinto está realizada en 1826. Ese mismo año Niépce realizó la primera fotografía de la historia. La vista está pintada en óleo sobre un metal de 12,1 cm. por 16,7 cm. En el cuadro podemos observar la antigua iglesia de Santo Domingo de Silos (la pequeña catedral), un bello ejemplar arquitectónico del siglo XVI. El templo presenta su antigua torre de tres cuerpos, realizada en piedra de aparejo irregular. Como detalle, observamos que en el segundo cuerpo todavía no tenía el reloj en su parte frontal.

El pórtico de la iglesia, obra de Pineda, también se observa en la pintura. Se abría bajo una amplia hornacina de arco de medio punto entre dos contrafuertes. Y constaba de un cuerpo inferior con pares de columnas cilíndricas a los lados y una puerta con arco de medio punto. Un segundo cuerpo con tres nichos entre columnas eran coronados por un frontón.

Desgraciadamente la magnífica torre de la iglesia, que llevaba años amenazando ruina, terminó hundiéndose en 1920 y en su caída arrastró la maravillosa portada de estilo plateresco. Dos joyas que han desaparecido para siempre y que tan solo nos quedan imágenes que documentan su belleza. La restauración del pórtico finalizó en mayo de 1923, pero lamentablemente se reconstruyó en un estilo sencillo con fábrica mixta de ladrillo y cajones de mampostería, siguiendo las líneas de la arquitectura toledana y perdiendo toda su primitiva esencia.

La vista de Pinto que realizó Canella se debió ejecutar al comienzo de la calle Maestra María del Rosario, la antigua calle del Arca, por la situación de la iglesia y la perspectiva de las escaleras . Podemos observar las amplias gradas de piedra maciza y su muro exterior decorados con bolas escurialenses.

Llama la atención las casas de la izquierda, donde hoy estaría situado el Parque del Egido. No adivinamos el viejo “Pósito“, antiguo almacén que custodiaba “diezmos y primicias” que fue construido en 1804 y que estaba situado junto a la Iglesia Parroquial. También nos resulta extraña la montaña que aparece detrás de la iglesia, aunque probablemente se tratara del Cerro de Cabeza Fuerte, casi 60 metros por encima de la altitud de Pinto. Otro de los elementos del cuadro que nos llama la atención es la ausencia del Arroyo de los Prados, que dividía a la villa en dos partes, y el antiguo puente del arroyo con reminiscencias romanas que llevaba a la puerta de la Parroquia.

Un denominador común en las vistas de Canella es la presencia de personajes, convertidos en los verdaderos protagonistas de la composición, por encima incluso del elemento urbano que se está representando. Así ocurre en este paisaje, donde vemos personas a caballo, carrozas y multitud de personas charlando con los característicos atuendos de la época. En ese año, el alcalde de la villa de Pinto era don José Fernández de la Cebal.

Sin duda, todo un documento histórico que desde La Voz de Pinto queremos compartir con nuestros lectores y con todos aquellos amantes de nuestra historia local.

Si quieres ver un grabado de Daniel Vierge de una corrida de novillos celebrada en la Plaza de la Constitución de Pinto en 1872, pincha en este enlace.

Mario Coronas

Mario Coronas

Licenciado en Periodismo y Humanidades por la Universidad Carlos III de Madrid. Licenciado en Comunicación Audiovisual por la Universidad Europea de Madrid. Técnico Superior en Realización de Audiovisuales.
Dirección general en La Voz de Pinto

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