Ganemos y PSOE votarán a favor de bajar el IBI en Pinto

Si el consistorio municipal pinteño aplica la propuesta del Catastro y mantiene el gravamen municipal en el 0,4%, la situación económica del Ayuntamiento de Pinto sería inviable.

El PSOE votará a favor para evitar entre otros, un posible ERE en Aserpinto, en el Ayuntamiento y el cierre de instalaciones deportivas.

El límite de gasto está en los 42 y 47 millones de euros, y con el actual tipo impositivo solo se recaudarían 40.

El Partido Popular afirma a través de su cuenta de twitter que “se ha mostrado, ahora y siempre, en contra de cualquier subida del tipo IBI”. 

Esta tarde a las 19:00 horas se celebra el segundo pleno extraordinario del Ayuntamiento de Pinto en lo que va de mes. Un pleno cuyos puntos del día serán la variación de la ordenanza y la nueva ponencia del catastro. En esta sesión, tanto Ganemos como los socialistas votarán a favor de la reducción parcial del IBI para que el Ayuntamiento no entre en quiebra técnica.

Ciudadanos, a través de su portavoz Juani Valenciano, ha afirmado que están de acuerdo con la bajada del IBI, pero solicitan al gobierno que dejen encima de la mesa la subida del gravamen ya que hay tiempo hasta el 31 de julio para establecerlo. “Una decisión tan importante para los vecinos no puede tomarse en 24 horas”. 

El Ayuntamiento de Pinto ingresa actualmente alrededor de 21,7 millones de euros en concepto de IBI (impuesto sobre bienes inmuebles), unos ingresos que ha hecho que el consistorio pinteño, con Miriam Rabaneda como alcaldesa, pueda presumir de ser uno de los consistorios que más han reducido su deuda en los últimos años. Datos muy positivos que han permitido cancelar el Plan de Ajuste Presupuestarios previsto para 10 años. Todo ello gracias, en parte, a los valores catastrales desactualizados fijados por el Ministerio de Hacienda, que no se actualizan desde 2003, en plena burbuja inmobiliaria. Sumado a la revalorización de los recibos (rondó el 10% anual) y al Decreto promulgado por el actual presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que incrementó un 25% el tipo a aplicar en 2012.

En campaña electoral, el Partido Popular adelantó que había logrado una revisión del Catastro. Un medida que haría que bajara el recibo del IBI una media de un 55%-según últimos datos facilitados por el Catastro-  si se mantenía el gravamen municipal del 0,4%. Es decir, las arcas municipales pasarían de ingresar alrededor de 22 millones de euros a algo más de 9 millones. Esta medida, a pesar del cambio de gobierno en el Ayuntamiento de Pinto, sigue en pie y el nuevo ejecutivo, dirigido por Rafael Sánchez, debe transmitir a la Dirección General del Catastro si acepta esta nueva valoración en los próximos días o rechaza esta propuesta.

Una rebaja que pone en peligro la viabilidad económica del Ayuntamiento de Pinto

El nuevo equipo de gobierno se ha encontrado con un nuevo obstáculo en su camino. Tras el rechazo a la primera propuesta de las retribuciones a percibir por los miembros de la corporación municipal y las protestas de los taurinos pinteños por retirar la subvención a los festejos taurinos, Ganemos Pinto se ha encontrado con la inviabilidad de poder aplicar los nuevos valores catastrales, que bajaría el recibo medio en los hogares un 43%, si se mantienen los actuales gravámenes municipales fijados en el 0,4%. Tras un estudio de la aplicación de la nueva propuesta del Catastro, la interventora municipal ha emitido un informe donde reconoce que “el Ayuntamiento de Pinto no sería viable financieramente e incumpliría la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad”. Si se aplicara el valor catastral con la rebaja del 43% de media y sin cambiar el tipo impositivo sólo se recaudarían 40 millones de euros, algo que haría que el Ministerio de Hacienda interviniera el consistorio pinteño de forma automática al no cumplir el objetivo mínimo de gasto que marca la Ley de Estabilidad Presupuestaria de Sostenibilidad Financiera que marca un gasto mínimo que debe estar entre 42 y 47 millones de euros.

Tras un estudio detallado por parte de los técnicos municipales y con el visto bueno de la interventora municipal, el Gobierno de Ganemos Pinto ha estimado que para poder llegar a una situación de garantías es necesario que el gravamen municipal pase del actual 0,4% al 0,75% para que el recibo no suba a las familias, pues lo recomendable sería incrementar el gravamen al 0,98%. Esta subida es la estimación mínima que desde intervención ven viable para mantener los servicios que presta en Ayuntamiento de Pinto en la actualidad sin aplicar ningún tipo de recorte o medida. Es decir, hacer frente a los gastos fijos de funcionamiento del municipio. Esto haría que los ingresos municipales descendieran 5 millones de euros, en vez de 13 pasando de los 21,7 millones a los 17,3. Además hay que sumar que se dejaría de ingresar la mitad por el impuesto de plusvalía (de 7 millones de euros se pasaría a ingresar 3,5).

Con todos los datos sobre la mesa, el recibo del IBI de los vecinos de Pinto pasaría a disminuir entre un 15% y un 20%. Una cifra inferior al 43% que se aplicaría si no se subiera el gravamen municipal.

Esta propuesta incluye, además, nuevas bonificaciones como por ejemplo a las familias de rentas más bajas en viviendas VPO que se les aumentaría la bonificación otros cuatro años. Esta media afectaría a 1.256 familias a lo largo de la legislatura, entre las que se encuentran las monoparentales con dos hijos.

El equipo de Gobierno liderado por Ganemos Pinto ha anunciado en una reunión previa celebrada en el consistorio municipal con representantes de los partidos de la oposición, que “viendo cómo evolucionen los ingresos municipales en los próximos años, el gravamen municipal que se aplica en el IBI puede ser retocado a la baja, ya que se tendría más margen de maniobra para hacerlo”. Si en el pleno esta propuesta planteada por los siete concejales de Ganemos Pinto no saliera adelante, el Ejecutivo no tendría otro remedio que declinar la nueva valoración catastral al ser inviable económicamente su aplicación.

El propio alcalde de Pinto, Rafael Sánchez, ha querido dejar claro a través de sus perfiles en redes sociales su decepción con las informaciones aparecidas en “algunos medios”, refiriéndose a las informaciones aparecidas en el medio local Zigzag: “No hay órdago de Ganemos Pinto en el tema del IBI, hay una realidad pura y dura”, afirmaba Rafael Sánchez en su cuenta personal de Facebook.

Diego Ortiz, portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Pinto ha afirmado que “votarán a favor de esta bajada por responsabilidad” ya que ha explicado que en caso de no cumplir esos objetivos marcados por la ley, el Ayuntamiento de Pinto sería intervenido por el Ministerio de Hacienda con consecuencias como un ERE en la empresa municipal Aserpinto, en el propio ayuntamiento y el cierre de instalaciones deportivas, entre otros.

Desde Ganemos han afirmado que “si el PP vota en contra, estaría en contra de bajar el IBI, una de las medidas estrella de su programa electoral”.

Guadarrama, un ejemplo idéntico al de Pinto.

La situación de Pinto con los nuevos valores catastrales presentados por la Dirección General del Catastro no es única en la Comunidad de Madrid. El municipio de Guadarrama (16.000 habitantes) ha rechazado en un pleno extraordinario (en Pinto se celebrará este jueves, 2 de julio) los nuevos valores catastrales debido a que “ponía en riesgo la viabilidad del Ayuntamiento, obligando al cierre de todos de los servicios municipales considerados como impropios, así como la reducción de la plantilla municipal”, según señaló en su exposición la alcaldesa, Carmen María Pérez del Molino.

En esta ocasión, el partido que ostenta la alcaldía, Agrupación Popular por Guadarrama (6), contó con el apoyo del Partido Popular (4), para rechazar esta medida propuesta por el Catrastro y que hubiera supuesto un ahorro medio del 48% en el recibo del IBI a sus vecinos, pero llevaría aparejado un serio riesgo para la viabilidad del Ayuntamiento madrileño.