Un tercer trabajador “subrogado” a la UTE Valoriza-Gestyona gana en los tribunales su retorno a la empresa municipal Aserpinto

La Justicia, que ya había fallado contra la “arbitrariedad” con la que se traspasaron trabajadores desde la empresa municipal a la empresa privada, acusa al anterior gobierno de Rabaneda de “persecución sindical”.

El Juzgado de lo Social nº 11 de Madrid ha condenado a Aserpinto por vulnerar los derechos de libertad sindical del trabajador Luis Martín Cabañas y declara nula su inclusión en la lista de empleados que fueron subrogados a la empresa Valoriza-Gestyona por el anterior gobierno de Miriam Rabaneda (PP).

Luis Martín es el tercer trabajador que gana en los tribunales su retorno a la empresa municipal, en las mismas condiciones de trabajo que mantenía antes de que el 1 de enero de 2014 fuesen privatizados los servicios de Recogida de Residuos Sólidos, Jardinería y Limpieza Viaria.

Así, el caso de este empleado, que es afiliado a CC.OO. y era miembro del comité de empresa de Aserpinto en el momento de la “subrogación”, se suma —esta vez por “persecución sindical” — al de Almudena Rivera, jefa de negociado del departamento de Compras y Proyectos de Aserpinto, y al de María Belén Ferreras, a quienes la Justicia les reconoció en marzo el derecho a volver a sus puestos de trabajo en la empresa pública.

Arbitrariedad laboral

Los distintos juzgados de lo Social que han conocido, uno a uno, los tres casos denunciados por trabajadores subrogados a la UTE Valoriza-Gestyona desde la empresa municipal han fallado contra la “arbitrariedad laboral” con la que actuó el Gobierno de Miriam Rabaneda a la hora de trasladar empleados, modificar sus condiciones laborales o, directamente, despedirlos, como ocurrió con cuatro trabajadores del Ayuntamiento.

Precisamente, este nuevo varapalo judicial contra el anterior gobierno pinteño se conoce un día después de que estos cuatro trabajadores despedidos volviesen ayer a sus puestos de trabajo; un compromiso adquirido por el nuevo ejecutivo de Ganemos Pinto que avalaba toda la Corporación, con la única excepción del PP.

También se da la circunstancia de que tanto las tres demandas de los trabajadores de Aserpinto, como las cuatro planteadas por los trabajadores del Ayuntamiento, han sido defendidas por el mismo bufete de abogados pinteños, mientras que el consistorio ha recurrido a letrados de Murcia y de Asturias, pagando cuantiosas minutas, para terminar perdiendo todos los pleitos.